«Cuando era pequeño, Francisco Martínez Bermell fue llevado a visitar la bodega de su abuelo en la ciudad portuaria de El Grao. Las hileras de barriles apilados, las elevadas escaleras de caracol y los tanques gigantes de fermentación le causaron una gran impresión, y años más tarde estableció su propia bodega en una pequeña colina en el camino entre Utiel y Requena. Hoy en día, la finca sigue siendo administrada por los descendientes de Don Francisco, quienes reciben a los visitantes de la bodega como parte de la Ruta del Vino de Utiel-Requena. El sitio original se ha ampliado con la construcción de la modernista Casa Don Ángel para albergar bodegas y almacenes…» Así empieza el artículo de Decanter, fechado el 15 de marzo de 2020, en el que hablan de nuestra historia y de nuestros vinos…

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